En la sexta edición del tradicional curso de Pediatría del Desarrollo  y Capacitación Profesional Superior en Desarrollo Infantil Temprano, estuvieron presentes dos especialistas y referentes en el tema: María Magdalena Contreras, pediatra, ex -jefa del servicio interdisciplinario del Hospital de Pediatría "Prof. Dr. Juan P. Garrahan",  y Claudia Viñuela Ortiz, licenciada en psicopedagogía y presidente de la Asociación de Redes Intervenciones Tempranas Argentina (ARITA).
A principios del siglo pasado los avances de la medicina lograron vencer las mayores causas de mortalidad infantil, las infecciones y la desnutrición,  pero el siglo XXI dio lugar a nuevas enfermedades de rápido aumento en la población, llamadas “nuevas morbilidades” vinculadas a las influencias socioeconómicas sobre la salud, el impacto de la tecnología, el sobrepeso y la obesidad. Los Trastornos del Desarrollo son un ejemplo de estas nuevas enfermedades que exigen un diagnóstico categórico prioritario de los trastornos del desarrollo y la necesidad de una intervención temprana apropiada desde diferentes especialiades  como la pediatría, la terapia ocupacional, la psiquiatría, la psicopedagogía, etc;  acorde a la singularidad del niño, su familia y a la patología, orgánica o no, que la condiciona.
Entender que cada niño es único y que se encuentra inserto en una particular e irrepetible familia es imprescindible para entender la complejidad del tema. Es por ello que urge propiciar  espacios en los que se pueda aprender y compartir saberes, superando las barreras que existen entre salud y educación. Todos los profesionales de dichos ámbitos tienen el compromiso de pensar juntos el desarrollo infantil temprano desde todos los puntos de vista, aportando la experiencia y los conocimientos de cada disciplina en una genuina transacción y actitud transdisciplinaria que, finalmente, impacte en la adecuación de sus capacidades y la compensación de sus dificultades, garantizándole una verdadera inclusión social.
“Nuestro objetivo es generar un tiempo y un espacio de discusión sobre las nuevas formas de diagnósticos donde realmente se promueva un verdadero intercambio de conocimientos entre las áreas de salud y  educación, dice  Gaminara, “hoy nuestro niño en el consultorio del pediatra presenta  cuestiones vinculadas con problemas de comportamiento en el aula y en casa, dificultades en el aprendizaje,  hiperactividad y los problemas atencionales entre otros. Ante esta situación los profesionales de la salud han tenido que recurrir a otros conocimientos, abrirse a este paradigma inclusivo y los profesionales de la educación tuvieron que aggiornarse a conocimientos que antes eran de salud" explica.
Por su parte Magdalena Contreras advierte  “la idea es transmitir no solamente cómo detectar o  como diagnosticar las cuestiones del desarrollo sino también como abordarlas desde el tratamiento o desde la rehabilitación y tratar de proporcionar bibliografía seria, actualizada, basada en la evidencia, que no haya charlatanería en estas cosas y que podamos asesorar bien tanto a los profesionales como a los padres de cómo abordad estas cuestiones”, enfatizó.

“El desarrollo infantil temprano está en pañales”
Así lo afirmó la psicopedagoga y especialista en atención temprana, Claudia Ortiz. “Lamentablemente la pediatría todavía no ha tenido mucha evolución en temas del desarrollo infantil temprano. En la actualidad los profesionales de la salud no pueden centrarse solamente en el control de la alimentación, de la vacunación y en los percentiles de crecimiento sino que también deberían preocuparse si el niño aprende en la escuela, si su comportamiento es adecuado o si se socializa con sus pares. Los nuevos pediatras deberán capacitarse  y tomar prestadas de otras disciplinas y de otros cuerpos teóricos la información para conocer cómo el niño se desarrolla en todos sus aspectos.  El pediatra tiene el privilegio de ir siguiendo junto a la familia mes a mes el crecimiento del niño pero al mismo tiempo tiene la responsabilidad de poder detectar algún problema de desarrollo y derivar a otros profesionales como psiquiatras, neurólogos, terapistas ocupacionales, etc. para que rápidamente actúen” puntualizó.

La opinión de los pediatras
El entusiasta grupo de asistentes pertenecían a diferentes disciplinas de las áreas de salud y educación.  Cecilia Vaula, pediatra e instructora en atención primaria en el Hospital Infantil de Córdoba dijo sobre el curso, “me parece sumamente importante la Pediatría del desarrollo como base y formación de los futuros pediatras. Los especialistas elegidos son excelentes, de reconocimiento nacional e internacional. Nosotros como trabajadores de la salud todos los días vemos problemáticas en el desarrollo de los niños y este tipo de capacitaciones nos brindan herramientas para una mejor calidad de atención”.
Otra colega, Belén Micheletti, residente de pediatría en el mismo hospital  también coincide en la relevancia de esta jornada  “desde hace tiempo que sabemos de este curso, nos hablaron muy bien de él y no dudamos en viajar para hacerlo.  El pediatra debe conocer y profundizar bien los temas sobre el desarrollo de los niños porque es el que tiene el contacto desde que nace. Sabemos  cada vez más la importancia que tiene detectar precozmente las alteraciones, darle un mejor tratamiento y  hacer el seguimiento para ofrecerle mejores oportunidades a ese niño”, reconoció.

Legado
Luchadora incansable de la Pediatría del desarrollo como especialidad intersdisciplinaria, Contreras solicita a los estudiantes y profesionales de las diferentes carreras involucradas que “trabajen con los padres, que los ayuden en el desarrollo de sus hijos y no desde un lugar de mandoneo o soberbia profesional sino como parte de un equipo. Es un momento difícil donde los papás trabajan mucho y a veces no hay tiempos para los niños y sobre todo para los más chiquitos”, concluyó.