A principios de este año un nuevo descubrimiento científico reveló la existencia de una bacteria intestinal probiótica con la propiedad de retardar el envejecimiento. El estudio fue realizado por científicos de la Facultad de Ciencias Bioquímicas y Farmacéuticas de la Universidad de Rosario (FBIOyF) y publicado en la revista de investigación, Nature Communications, que pertenece a una de las editoriales científicas más prestigiosas del mundo.

La fuente de la juventud
Desde la antigüedad el hombre ha perseverado en la búsqueda de la fuente de la juventud. Ya Heródoto en sus “Historias” comenta la entrevista entre el rey de Etiopía y los embajadores del rey persa Cambises II sobre los alimentos que éstos consumían para vivir largamente. A partir de allí podemos encontrar referencias de esta pesquisa que atraviesa toda la historia humana.
Pero lejos de los mitos o relatos y en pleno siglo XXI, científicos argentinos pudieron demostrar el aumento significativo de la longevidad a partir de la ingesta de una bacteria intestinal probiótica llamada Bacillus subtilis. En los alimentos de ciertos países asiáticos como por ejemplo Japón, el Bacillus sería responsable de efectos beneficiosos sobre el sistema inmunitario y el retardo del envejecimiento través de la colonización del intestino.
Aunque sus efectos fueron probados solamente sobre el gusano Caenorhabditis elegans, los científicos aseguran que las vías regulatorias del envejecimiento de este tipo de nematodo, están conservadas a lo largo de la evolución y son similares a las de los seres humanos.
Este descubrimiento implica la posibilidad de preservar al individuo del desarrollo de enfermedades infecciosas, neurodegenerativas o incluso del cáncer.

Egresado de la FBCB partícipe del logro
Juan Gabriel Costa, egresado de la Licenciatura en Biotecnología y doctorado en Ciencias Biológicas de la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas de la UNL (FBCB) formó parte del equipo de investigadores y becarios del CONICET que realizó el descubrimiento. Su tarea fue la de ejecutar los cálculos estadísticos de la investigación para poder afirmar las diferentes hipótesis, “casi todos los experimentos se tradujeron en números, procesamos estadísticamente gran cantidad de información cuantitativa que debía también cruzarse entre sí para compararse y evaluarse”, explica Costa.

La estadística como herramienta clave
Para poder publicar una investigación de envergadura, las revistas especializadas exigen una importante cantidad de experimentos que permitan confirmar la hipótesis del trabajo que se expone. “Todos los experimentos que se realizaron con el Caenorhabditis elegans se tradujeron en parámetros como por ejemplo los días de supervivencia de los gusanos, unidades formadoras de colonias, intensidad de fluorescencia entre otros. Es aquí donde la estadística se convierte en una herramienta indispensable para validar la hipótesis planteada”, dice Costa.
En la FBCB, “Estadística” es un curso que dicta el Departamento de Matemática - pionero en el tratamiento estadístico de datos de origen biológico- que pertenece al segundo año de las carreras de Lic. en Biotecnología y Bioquímica. Esta capacitación ofrece al estudiante los conocimientos necesarios para poder comprender y avanzar en las evaluaciones estadísticas específicas de cada área científica, "la razón por la cual he podido calcular los datos estadísticos en diversas áreas, fue gracias a la excelente formación que me dio mi carrera de grado ”, subraya Costa.

Juan Gabriel Costa
Licenciado en Biotecnología y doctor en Ciencias Biológicas egresado de la FBCB, desarrolló varias pasantías en investigación y docencia.
Fue miembro del Comité de Ética y Seguridad en la Investigación de la Facultad durante 4 años. En la actualidad se desempeña como investigador en el Departamento de Microbiología de la FBIOyF y como Jefe de Trabajos Prácticos de la cátedra de Fisicoquímica de la FBCB.
Su tesis doctoral fue sobre el “Estudio de la utilidad de las proteínas P22, P30 y P35 de Toxoplasma gondii para el diagnóstico de fase aguda de la Toxoplasmosis”.

Título del paper Bacillus subtilis biofilm extends Caenorhabditis elegans longevity through downregulation of the insulin-like signalling pathway